May apuesta a acuerdo con laboristas para destrabar el Brexit y enfurece a su partido

La primera ministra británica, Theresa May, ofrece una rueda de prensa tras una reunión de gabinete en Londres. 2 de abril de 2019. Jack Taylor/Pool vía REUTERS

LONDRES (Reuters) – La primera ministra británica, Theresa May, dijo el martes que pedirá a la Unión Europea un nuevo aplazamiento del Brexit para tener tiempo de negociar con el líder del opositor Partido Laborista, una apuesta de último minuto para superar el impasse, lo que enfureció a muchos en el Partido Conservador.

Casi tres años después de que Reino Unido votó sorpresivamente a favor de abandonar la UE en un referendo, aún no está claro cómo, cuándo o si Gran Bretaña dejará el grupo al que se incorporó en 1973.

En un comunicado preparado por su despacho de Downing Street, después de que encabezó reuniones del gabinete que se extendieron por más de siete horas sobre cómo delinear una forma para resolver el rompecabezas del Brexit, May dijo que buscaría una nueva prórroga de la fecha límite.

La propuesta de May ofrece la posibilidad de que Reino Unido mantenga una relación mucho más estrecha con la UE después del Brexit, aunque podría provocar un cisma en su Partido Conservador debido a que la mitad de sus legisladores quieren un quiebre claro con el bloque.

“Estoy ofreciendo sentarme con el líder de la oposición e intentar pactar un plan -al que ambos nos apeguemos- para garantizar que dejemos la Unión Europea y que lo hagamos con un acuerdo”, dijo May.

“Necesitaremos una nueva extensión del Artículo 50, una que sea tan corta como sea posible y que termine cuando aprobemos un acuerdo. Necesitamos ser claros en que tal extensión es para garantizar que saldremos de forma oportuna y ordenada”, agregó.

Corbyn dijo que estaría “encantado” de reunirse con May y que no pondría límites antes de las negociaciones, a la vez que reiteró que su partido busca mantener la unión aduanera con la UE, el acceso de Reino Unido al mercado único y las protecciones para los trabajadores.

Agregó que mantendría la posibilidad de una moción de censura al gobierno si un eventual acuerdo no consigue una mayoría en un Parlamento británico profundamente dividido.

Alemania y Francia pidieron mayor claridad a Londres, advirtiendo de que si no hay una sensación clara de lo que desea Reino Unido, podría encaminarse a un Brexit desordenado dentro de pocos días. El presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk, pidió paciencia con Gran Bretaña.

Mantener una relación estrecha entre Reino Unido y la UE después del Brexit es inaceptable para muchos en el Partido Conservador. Muchos partidarios del divorcio estaban furiosos por la apertura de May hacia Corbyn.

“Este es un enfoque profundamente insatisfactorio, no sirve al país, no cumple con el resultado del referendo y la historia no augura nada bueno”, dijo Jacob Rees-Mogg, un destacado partidario del Brexit, a periodistas después de una reunión del grupo parlamentario euroescéptico de línea dura del partido.

Boris Johnson, el rostro de la campaña Brexit 2016, dijo que un compromiso con el Partido Laborista traicionaría el referendo, afirmando que la quinta economía más grande del mundo podría estar fuera del bloque pero seguiría sometida a sus normas.

Reporte adicional de Jan Strupczewski en Bruselas, Andreas Rinke y Michelle Martin en Berlín, Kylie MacLellan, Alistair Smout, William James, Andy Bruce, Costas Pitas, Andrew MacAskill y Ritvik Carvalho en Londres y Tom Miles en Ginebra, Richard Lough, Michel Rose y John Irish en París; Escrito por Guy Faulconbridge; Editado en Español por Ricardo Figueroa