
LONDRES/MUMBAI (Reuters) – ¿Ha llegado el momento de deshacerse de los teléfonos de Huawei? Es la pregunta que se hacen algunos usuarios después de que el gigante tecnológico estadounidense Google dijo que suspenderá sus negocios con la firma china, poniendo en peligro su acceso futuro a Gmail, YouTube y Chrome.
La orden a las compañías estadounidenses podría afectar a decenas de millones de consumidores en Europa, su mayor mercado fuera de la China continental.

La decisión de Trump, que asegura estuvo motivada por preocupaciones de espionaje en el marco de una amarga guerra comercial con China, podría acabar de golpe con las ambiciones de Huawei de superar a Samsung como el mayor fabricante mundial de móviles.
Economías emergentes como Kenia son claves en las ambiciones de Huawei, en un momento en que busca vender más dispositivos de precio bajo y medio fuera de China. India, donde Huawei tiene una cuota de mercado de un solo dígito, también es potencialmente vital.
Huawei afirmó el lunes que seguirá facilitando actualizaciones de seguridad y servicios para sus móviles y tabletas ya vendidos. Además, el equipo de Google que trabaja en el sistema operativo Android dijo a los usuarios de Huawei en su cuenta de Twitter @Android que cumplirá con los requisitos de Estados Unidos mientras garantiza que “servicios como Google Play y la seguridad de Google Play Protect seguirán funcionando en su actual dispositivo de Huawei”.