La tecnología, no el comercio, es responsable por áreas rezagadas de economías desarrolladas: FMI

El logo del Fondo Monetario Internacional durante una conferencia de prensa en Santiago, Chile. 23 de julio de 2019. Rodrigo Garrido.

DENVER, 9 oct (Reuters) – La creciente división entre regiones exitosas y “rezagadas” de las naciones desarrolladas ha crecido en gran medida por tendencias de automatización y productividad, no por el comercio global, dijo el Fondo Monetario Internacional en uglon informe publicado el miércoles antes de su próximas reuniones anuales.

“En promedio, las perturbaciones comerciales (…) no parecen conducir las diferencias en el desempeño del mercado laboral entre las regiones rezagadas y otras”, encontró el FMI.

“Por el contrario, las perturbaciones tecnológicas (…) aumentan el desempleo en las regiones que son más vulnerables a la automatización, y las regiones más rezagadas están particularmente afectadas”.

Si bien los resultados pueden diferir según el país, el FMI dijo específicamente que sus hallazgos no eran inconsistentes con el estudio, que halló grandes dislocaciones comerciales en los centros manufactureros de Estados Unidos.

El texto agrega que en el mundo desarrollado en su conjunto “conmociones de la competencia de importación (…) del auge económico de China no tienen marcados efectos promedio sobre el desempleo regional en una amplia muestra de economías avanzadas”.

El tema está en el centro del debate sobre la globalización, cómo afecta a grupos de votantes políticamente influyentes en algunos países, y si el remedio proteccionista que piden algunos políticos planteará riesgos para el crecimiento global que será peor que la enfermedad.

Si bien la concentración de empleos y riqueza en partes de un país puede ser “característica normal del crecimiento” que terminarían por dar beneficios de “recuperación” a otras áreas, el FMI dijo que el proceso de “convergencia” en el mundo desarrollado ha disminuido o se ha detenido.

Las áreas que sufren “ineficiencias persistentes” pueden estar en riesgo de quedarse atrás para siempre, dijo el FMI. La situación “puede alimentar el descontento y la polarización política, erosionar la confianza social y amenazar la cohesión nacional”.

Sería el caso en Estados Unidos, donde la desafección entre los trabajadores que se sienten desplazados por el comercio o la mano de obra inmigrante influyó en la elección de Donald Trump como presidente.