Perú siempre grata experiencia

Ernesto Pinto Bazurco Rittler

Escribo  en el avión que me lleva de vuelta a Europa . y comparto con mis lectores algunas reflexiones. Lo hago con  el cansancio no de un viaje transatlántico , sino con el agotamiento de quien ha viajado dos horas al aeropuerto Jorge Chávez y pasado por todas las incomodidades del  terminal aéreo. En el camino vi a más de un centenar de policías y un par de docenas de carros policiales apostados. El chofer que me conducía me explicó que estaban ahí para brindarles facilidades a un equipo de balompié extranjero. Ahí recordé la frase de que el Peru es madre de extranjeros y madrastra de peruanos.
Es más, al conductor y ocasional interlocutor le parecía algo extraño cuando le pregunté cuál sería el costo de este operativo policial y si la cuenta se la pasarían a la empresa extranjera que venía a lucrar en el Peru

En efecto  el Foro Económico Mundial ya señaló los costos muy elevados en el Peru por deficiencias graves en el sistema de transportes. . cuando llego a Alemania  por la misma distancia que recorrí en Lima para llegar al Aereopuero me tomara no la mitad sino la cuarta o quinta parte del tiempo.

Lo grave está en que en el Peru es una mala costumbre la de perder o hacer perder el tiempo.

Pero hay aspectos positivos y gratificantes. Tenemos avances en el campo cultural. Fue grato para mi que el Ministro de Cultura presentara mi más reciente novela historia que publica la prestigiosa editorial Planeta con el título «Isabel de los Mares sus secretos y tesoros».
El género de novela histórica no está suficientemente desarrollado en nuestro país. Pero  es una oportunidad para acercar a público a personajes históricos como Isabel Barreto, una almirante peruana con una lectura recreativa.
Al igual que sucede con el embotellamiento del tráfico automotor en el Peru nos hemos encasillado y limitado en creer por muchos años que la cultura es lo que son nuestras ruinas. Es tiempo ahora se superar aquello de rendirle atención a las cosas en vez de a las personas. Debemos ser promotores de nuestros héroes universales de aquellos que como Isabel  o Jorge Chávez han ganado reconocimiento más allá de nuestras fronteras por sus realizaciones y que deberían ser iconos dignos de emular para los tres millones de peruanos que viven en el extranjero  que necesitan también el estímulo del reconocimiento internacional.