
Toronto (Canadá).- John Ralston Saul, desde hace varias décadas el pensador, político y filósofo más influyente de Canadá, cree que el COVID-19 puede ser la última puntilla al globalismo, cuyo fin anticipó en 2003.
Ralston Saul propone aprovechar el momento para reiniciar la economía, dando un mayor peso al movimiento cooperativista y a los ciudadanos.
A sus 72 años, lleva toda su vida escribiendo sobre el concepto de nación, los modelos económicos, el individualismo, las estructuras de poder y el papel del ciudadano en la sociedad.
Pregunta: En 2004 escribió el ensayo “El colapso del globalismo” en el que anticipaba que el sistema económico de la globalización, con su “determinismo tecnocrático y tecnológico e idolatría del mercado” estaba acabado. ¿El COVID-19 lo matará definitivamente?
Respuesta: Es más que evidente que el sistema que ha estado en vigor durante los pasados 50 años ha fallado… Debería ser su final. En 2008 se debió haber producido grandes cambios, pero no sucedió. La élite se las arregló para rediseñarlo de forma que no fuese su culpa.
P: Ha señalado que si no actuamos en el momento adecuado, el precio será mucho mayor. ¿A qué se refiere?
R: Siempre pongo el ejemplo de lo que pasó antes, durante y después de la revolución francesa y las guerras napoleónicas. En Europa se acumuló una gran energía para que se produjesen enormes cambios en 1815. Pero en vez de eso, el príncipe austriaco Klemens von Metternich y las viejas élites maniobraron, se mantuvieron en el poder y cambiaron el resultado de la guerra. El resultado fue a partir de 1848 una serie de revoluciones, el nacimiento del comunismo, una nueva clase de violencia, la guerra de clases, dos guerras mundiales. Así que se paga cuando no se actúa, especialmente cuando sabes cuál es el problema.
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P: ¿Cómo será la geopolítica en el mundo tras el COVID-19?
R: Desde hace tiempo digo que el globalismo se ha acabado y que estamos abocados a lo que esencialmente son conflictos regionales, como lo que existía en el pasado, antes de la existencia de los imperios europeos. Vamos hacia una situación en la que habrá regiones que pelearán entre ellas por lo que sea: China, Asia del sur, Europa, Estados Unidos y las incógnitas de África, Rusia y Latinoamérica. (…) Si Estados Unidos está de caída, no hay nada más vengativo y cruel que un imperio en rápido declive.
El otro gran temor que me produce esto se puede ya ver, el racismo, el nacionalismo negativo, el populismo, las voces enfadadas intentando aprovechar esto en su ventaja.