
No hay inversión y solo la inercia mueve al sector.
La incertidumbre política frena el ingreso de inversiones al sector agroindustrial para la ampliación de áreas de cultivo, por lo que el 2023 podría ser el último año que registre un incremento en el volumen de agroexportaciones no tradicionales, según la Asociación de Gremios Productores Agrarios del Perú (AGAP).
El gremio explicó que la producción de un cultivo demora entre tres y cuatro años desde su instalación. Justamente, entre el 2019 y 2020 -antes de la aprobación de la nueva ley agraria- se realizaron las últimas inversiones, por lo que en el 2023 los envíos de frutas y hortalizas frescas alcanzará su pico de US$ 11,554 millones. “Después, si no afrontamos la tarea de generar confianza, poco haremos por el agro, que congrega al 25% de la población”, dijo Gabriel Amaro, director ejecutivo de AGAP.
Según los agroexportadores, desde el 2021 y este año las inversiones son solo en mecanización para reducir mano de obra y cambio de variedades por otras más productivas con menores costos de producción.
“Otros países, competidores de Perú, están en la carrera de generar eficiencia, mejorar su legislación interna, pero eso no ocurre en el país. La incertidumbre política y la disponibilidad del agua no ayudan”, anotó.
Uno de los pedidos que ha hecho el gremio al Ejecutivo es la pronta publicación del decreto supremo que defina las actividades agroindustriales que estarán afectas a la nueva ley agraria aprobada a fines del 2020.
Asimismo, al Ministerio de Desarrollo Agrario y Riego (Midagri) ha hecho llegar una solicitud para emitir una norma que permita la importación de agroquímicos pues el ingreso de dichos productos ha quedado paralizado desde mediados del 2020.
AGROFEST
Para el crecimiento de las exportaciones de frutas y hortalizas en el 2023 es clave la articulación de la cadena productiva. AGAP anuncia la realización de “AGROFEST Show Perú 2022″, el primer evento de la agricultura moderna del Perú, que se desarrollará en Lima entre el 20 y el 22 de junio. Será la primera feria virtual y presencial del agro de la costa del Pacífico, y un espacio de relacionamiento masivo entre marcas, públicos y proveedores en el sector agrario. En sus tres días ofrecerá conferencias, plenarias y paneles de debate.