Recuperando el empleo y los ingresos

Cuando se consulta a los peruanos sobre los principales problemas del país, un porcentaje importante señala a la “falta de empleo” como unos de los principales problemas que afectan a los ciudadanos, así lo manifiestan el 18,2% de los peruanos mayores de 18 años, en el primer semestre del presente año.[1] Es verdad, los daños sufridos por la pandemia de la Covid-19 en la economía, el empleo y los ingresos fueron bastante profundos, que pasados casi tres años, aún no se recuperan plenamente.

La buena noticia es que, en el tercer trimestre del año 2022, el empleo en Lima Metropolitana, la principal ciudad del país, que concentra casi un tercio de la población nacional, el empleo creció en 7,0%, respecto a similar periodo del año 2021, es decir se crearon 328 mil nuevos empleos, en dicho trimestre, con lo cual la población ocupada ascendió a 4 millones 983 mil puestos de trabajo, en la Capital de la República,[2] si bien es una cifra alentadora, apenas representa el 1,1% más del total de ocupados que existían en el mismo trimestre del año 2019, año pre pandemia, es decir la recuperación del empleo ha sido lenta y difícil, tanto en términos cuantitativos como cualitativos.

Las cifras revelan que se ha recuperado el empleo perdido en dos años de pandemia, sin embargo, la tasa de desocupación es alta, 7,7% en Lima, es decir 414 mil pobladores están activamente buscando un empleo, en el tercer trimestre del año. Asimismo, el empleo adecuado creció en 17,4%, mejorando la calidad del empleo en cerca de 433 mil personas ocupadas, si bien el proceso de recuperación está en camino, el empleo adecuado es aún menor en 8,1% al nivel pre pandemia, cifra que marca una brecha aun grande por cubrir y mejorar en la calidad del empleo.

Comportamiento inverso presentan las cifras de la población sub empleada, que fue lo que más creció inicialmente tras la pandemia, el sub empleo en Lima Metropolitana disminuyó en 4,9% en el tercer trimestre del año 2022, al compararlo con su similar del año anterior, si bien la cifra indica un ligero mejoramiento de la calidad del empleo, esta cifra es aún mayor en 17,9% a lo registrado en el año pre pandemia, lo cual señala los retos por alcanzar en materia de empleo, en un escenario de alta informalidad laboral.

Asimismo, es necesario señalar que los ingresos por trabajo, en términos nominales en el tercer trimestre del año, han alcanzado el nivel pre pandemia, ubicándose en S/ 1,745 soles promedio. Si bien representa un crecimiento importante respecto a los bajos niveles del año 2020 y 2021. En términos nominales hemos alcanzado el nivel que exhibíamos hace tres años atrás, pero en términos reales, con una inflación alta en los últimos dos años, éstos han perdido parte de su poder adquisitivo, que es necesario recuperar con mayor productividad del trabajo.

Es necesario siempre, tener presente esa especial característica del trabajo como fuente creadora de valor y de riqueza, sin el trabajo las sociedades no pueden avanzar, el trabajo es condición sine qua non para el crecimiento económico y el desarrollo. Sin este, y los ingresos que genera, es imposible mejorar las condiciones de vida de las familias y disminuir los altos porcentajes de pobreza, lo cual solo es posible con ingresos por trabajo que cubran las principales necesidades de las familias.

En el Perú, una cuarta parte de la población peruana sufre de pobreza, es decir que no puede cubrir el costo de una canasta mínima de alimentos y no alimentos, por ello es que la lucha diaria de las familias se traduce en conseguir un empleo, o recuperarlo, o mantenerse en el mismo, lo cual es duro en circunstancias de débil crecimiento económico, y si a estas limitaciones le agregamos la inestabilidad que vivimos, las expectativas deprimidas el cuadro se complica, por ello que se debe insistir en el incentivo a las inversiones, variable clave en este proceso de recuperación. La pandemia de la Covid-19, ha tenido efectos muy negativos en la economía del país induciendo a débil crecimiento económico, el empleo y los ingresos. Tras todo ello, no queda más que crecer y crecer, con mayor inversión, que se debe posibilitar.


[1] INEI – Perú: Percepción ciudadana sobre Gobernabilidad, Democracia y Confianza en las Instituciones. Semestre Móvil Enero-junio 2022. Agosto 2022

[2] INEI Informe Técnico: Situación del Mercado Laboral en Lima Metropolitana, Trimestre Móvil Julio-Agosto-Setiembre 2022. Lima, octubre 2022.