Geopolítica y economía

Los intereses políticos suelen ser opuestos a los objetivos de la economía nacional. Las promesas de prosperidad personal en base a igualdad generalizada son más creíbles por los electores. Hoy en día las falsas noticias son más leídas y que la verdad. De igual manera, las mentiras y las falsas ideologías son mas aceptadas por el electorado.

En consecuencia, si la mentira tiene mas seguidores que la realidad, sería imposible prosperar. He aquí porque las democracias están fracasando. Creer en una igualdad inexistente inclina la votación a favor de políticos ilusos o ignorantes.  Solo el descontento de los votantes hace posible un cambio temporal hacia la derecha democrática.

Las izquierdas igualitarias populistas seguirán fracasando, pero el discurso político es más poderoso que el fracaso, como por ejemplo en Argentina. La democracia solo funciona como reclamo, no como propuesta de prosperidad económica para el desarrollo. El no entendimiento o ignorancia seguirá empujando el péndulo hacia las propuestas igualitarias populistas, aunque sean solo promesas u opciones imposibles de lograr.

La tendencia científica está empujando al mundo a la robotización. Un mundo donde habrá mucha gente con trabajos manuales, pocos administrativos y menos ejecutivos.

La empresa privada individual está desapareciendo. No es claro aún cómo se formarán los nuevos cuadros de poder científico. Más aún cuando la ética ha perdido valor en la humanidad. Pareciera que el mundo como es hoy podría terminar para volver a empezar con una nueva población mas sometida por la nueva realidad científica.  

El discurso de la democracia es libertad; el de la izquierda, justicia social e igualdad.

El discurso de  libertad no compite con justicia e igualdad. Las democracias irán perdiendo. El mundo chino es una muestra de lo que pude ser el planeta en general.

Sumado a ello, la inflación mundial a gran escala puede retardar el  deterioro de numerosos países.