

Recientemente hemos podido conocer las cifras oficiales de la pobreza en el Perú, situación que refleja las grandes carencias de las personas y sus familias, carencias que no les permiten cubrir sus principales necesidades para tener una vida digna. Las cifras señalan que, en el año 2022, la pobreza monetaria aumentó a 27,5%,[1] 1,6 puntos porcentuales más que el año 2021, y 7,3 puntos porcentuales mayor al nivel de pobreza del año 2019, que exhibió la cifra más baja de pobreza en los últimos veinte años, afectando a una quinta parte de la población, en dicho año. Las cifras de ahora, permiten estimar que, en el país, existen 9,2 millones de peruanos en situación de pobreza y pobreza extrema. La inflación, la debilidad del crecimiento económico, la inestabilidad política, están en el trasfondo del comportamiento de las cifras de pobreza.
Este resultado negativo impacta en muchos aspectos de la vida nacional, es un grave retroceso, considerando que en las últimas dos décadas la pobreza se redujo considerablemente, pasó de afectar al 58,7% de los peruanos en el año 2004, y bajó hasta el nivel de 20,2%, en el año 2019, una reducción considerable que es fruto, principalmente, del crecimiento económico, sumado, es verdad, a la acción social del Estado. Esta circunstancia obliga a impulsar un mayor dinamismo en la economía con medidas que impulsen la inversión, principalmente la privada que genera mayor empleo y posibilita los ingresos necesarios para que más familias salgan de la pobreza.
Sin crecimiento económico ello no será posible, y por supuesto se deberá mejorar la focalización de las políticas redistributivas, allí donde más requiera la presencia social del Estado, tanto en el área urbana como rural. El impacto es fuerte, que incluso se extiende al tema de inseguridad, uno de los principales problemas que vive el país, considerando que la victimización afecta en mayor proporción a las clases medias y de menor nivel socioeconómico, especialmente los más pobres.
Las cifras de pobreza del año 2022, distribuida por áreas indican que el 41,1% de la población del área rural del país se encuentran en situación de pobreza y pobreza extrema, en el área urbana, la pobreza afecta al 24,1% de la población que vive en las ciudades. De lo afirmado se puede deducir, que lo que caracteriza a la pobreza en el Perú, en la actualidad, es su mayor concentración en las zonas urbanas, por el número de personas en pobreza, aproximadamente 6,4 millones de pobres, mayormente residiendo en la periferia de la ciudad, en asentamientos humanos y barrios marginales.
La pobreza urbana es más del doble en número de pobres que los que viven en el área rural. Sin dejar de atender la pobreza rural, hay que impulsar planes y programas para atender la pobreza urbana, entre una de ellas las políticas de empleo impulsadas por el Estado y los procesos de incentivo a la formalidad podrían ser posibles alternativas. En este recuento es necesario señalar que la pobreza extrema, la más grave, porque las personas, con su gasto ni siquiera pueden cubrir el costo de una canasta mínima de alimentos, ubicándose a la raya del hambre, afectó al 5,0% de peruanos, aumentó en 0,9 puntos porcentuales respecto al año 2021, y 2,1 puntos porcentuales respecto al periodo pre pandemia, estas cifras permiten estimar que cerca de 1,7 millones de peruanos se encuentran en pobreza extrema.
La pobreza monetaria en el país, se mide comparando el gasto promedio de un poblador, frente al costo de una canasta mínima alimentaria y no alimentaria, que, en el año 2022, se estima en 415 soles por persona, las personas que no pueden cubrir ese costo están en condición de pobreza, una familia de cuatro miembros requeriría un gasto mínimo de 1,660 soles. La canasta mínima, es alimentaria porque contiene los nutrientes y calorías necesarias, y no alimentaria porque considera los gastos en vivienda, vestido, calzado, transporte, comunicaciones, gastos en salud y otras necesidades principales, que al no poder ser cubierta indica la condición de pobreza, y pobreza extrema si ni siquiera puede cubrir el costo de una canasta mínima alimentaria, cuyo valor per cápita ascendió a 226 soles, en el año 2022.
[1] INEI Informe Técnico, Perú, Evolución de la Pobreza Monetaria, 2011-2022. Lima, mayo 2023.